De la trata, nadie escapa


A lo largo de toda la América Latina hemos sido testigos de cómo se han ido manifestando los casos de la trata de mujeres como una simple comercialización, que viola a más de un artículo de los Derechos Humanos. La situación en nuestros países tanto históricas como geopolíticas, colaboran con la violación y hacen que tome un auge sobresaliente en nuestra época, aprovechando así tanto la corrupción de nuestros países como la falta de educación, para así ser escenario parte de un proyecto complejo, que se ha venido desarrollando a lo largo de los años y tiene trascendencia histórica en relación a la esclavización y los derechos de las mujeres y puede en nuestros días lograrse un avance más sobresaliente si incitamos a la investigación de una problemática social que conlleva cada vez más a transgredir las leyes.

La denominada “Nueva esclavitud” en Latinoamérica, con el paso del tiempo se ha ido agravando, siendo así esta zona la segunda en el mundo, luego de Asia con mayor número de víctimas tanto de menores de edad como mujeres adultas obligadas a ejercer la prostitución en diferentes zonas como mercancía en la que hay un debido procedimiento de este denominado “negocio”.
Esta forma de esclavitud moderna recluta varios personajes en la realidad que nos acontece y de la que ignoramos o pasamos por alto, está la víctima que varia de edad, de condiciones económicas generalmente precarias, aunque hay muchas victimas secuestradas de buenas condiciones y con hogares sólidos, estas mujeres son consideradas la “mercancía” y el costo varía según la edad, y físico; hay un reclutador de mujeres, que en diferentes países usan tácticas como el engaño, entrevistas de trabajo falsas, promesas laborales con otros sentidos, o las involucran sentimentalmente hasta lograr esconderlas del mundo y también las escogen arbitrariamente si se las ve solas en algún lugar y más aún si son de hogares con dificultades, dado ello es primordial de mantener alerta a toda la población.

En las investigaciones que intentan abordar más amplia y profundamente el tema, se ve limitado justamente por los agentes que usan estas redes como escudos entre la realidad de estás víctimas y el negocio que genera un aproximado de 300 mil víctimas en latino América incluyendo el Caribe. Las mujeres pueden formar parte de una red, ser víctima de un grupo de proxenetas independientes que pueden lograr entre estos inclusive el traslado a países europeos o en algunos casos a Estados Unidos, también se visualiza un ventaja entre las características de las estas, pues según las investigaciones de la trata de blancas un gran porcentaje de victimas son mujeres inmigrantes que han sido engañadas con trabajo, o bien tienen problemas migratorios.

No hay comentarios: